Cróunica 3, día 14

Toca salir a tomar el vermú; la primera sorpresa la encontramos en las banderas del paseo. Los colegas de la Garnacha se han vestido de mejicanos y van por las calles entonando rancheras acompañados de una charanga-mariachi. Muy guapas ellas, con sus coletas y todo, muy machos ellos, aunque había lupitas con barba y pelo en pecho.

Tras la media hora de rigor para pedir una de gambas rebozadas en la ronda nos vamos al paseo a ver pasar la vida desde un velador y, como siempre, pasa de todo, desde una correa de perro sin su correspondiente chucho hasta gente disfrazada de chacha.

Siesta, toros (bueno, toreros, porque de toros poquico) y a bailar la charanga hasta la cena, que fue complicada; la llegada del pollo asado se hizo esperar y los ánimos se fueron calentando. Mucha cola y 500 raciones; nos vimos obligados a utilizar la norma de primero los de la peña, luego los de otras peñas... y casi vino justo no sin alguna discusión por medio. No sé si los ánimos estaban alterados por el calor, la espera o la forma que tenían de destrozar las canciones los del karaoke.

Café en el paseo y una vuelta por las peñas: la Solera llena para escuchar a los Sabineros Pancho Varona y cía. La Nogara petada para oír a la Bogus que llevan tantos años yendo a la peña que parecen del decorado. Tuve que ir a mi peña porque era el encargado de pagar al grupo Luz Oscura. Casi nadie en el local. Menos mal que habíamos encontrado el chorizo y el fuet desaparecidos en el vino de honor, preparamos una recenica e invitamos a todo el que pasaba. Todavía más baile con la Bogus, visita a la Garnacha con un poco de panceta en bocata y otra vez a la Rouna, éramos muy pocos (8 ò 10) y allí estivimos arreglando el mundo y es que algo habrá que hacer para conseguir que los rounos estemos en el local algún rato más que para las cenas y la peña tenga un aspecto más animado para los viandantes.

A las siete de la mañana, para casa, que ya es hora. Las mesas del coso ya estaban preparadas en la terraza y los peñistas encargados del asunto taurino, con su camiseta de pastores, tomando un café y es que hay mucha gente currando por la cara en Sanroque, ya he nombrado a los de las cenas, los de los toros..